Suponemos que a Nata la abandonaron al caer enferma de Sarna. La encontramos en Parla, Madrid, rebuscando y durmiendo en las basuras de un barrio marginal. Con una delgadez bastante extrema, con heridas de rascarse a todas horas y todo ello con tan solo unos 8 meses de edad. Fue fácil cogerla, se moría de hambre. Enseguida la llevamos al veterinario y en efecto el test de sarna dio positivo como temíamos. Estuvo alrededor de un mes y medio en acogida, hasta que Jorge, un hombre maravilloso se fijo en ella y quiso hacerla feliz para siempre.
¡ADOPTADA! 20-Junio-2014