«Comer carne procesada, como salchichas, hamburguesas o embutidos aumenta el riesgo de sufrir cáncer, según anunció ayer un panel de expertos de la Organización Mundial de la Salud (OMS). Estos alimentos son “carcinogénicos para los humanos” y están incluidos en el grupo de sustancias más peligrosas para la salud junto con el humo del tabaco, el plutonio o el aire contaminado».
El dictamen concluye que estos alimentos son “carcinogénicos para los humanos” y los incluye en el grupo de sustancias más peligrosas para la salud junto con el humo del tabaco, el plutonio o el aire contaminado, entre otros más de 100 compuestos analizados anteriormente. El organismo también considera que la carne roja (vacuno, cerdo, caballo, cordero, cabra…) es “probablemente carcinogénica”.
Por carne procesada se entiende “cualquier tipo de carne que haya sido transformada con sal, curación, fermentación, ahumado, para mejorar el sabor y preservar el alimento” y se determina que su relación con el cáncer colorrectal es concluyente. El incremento del riesgo está directamente relacionado con la cantidad consumida, al igual que pasa con el tabaco, por ejemplo.
En el caso del consumo de la carne roja que no esté procesada, los indicios son menores, clasificándola en una segunda categoría (2A) de riesgo de cáncer como el de páncreas y próstata (además del colorrectal).
El motivo por el que carne roja presenta esta asociación es por el tipo de hierro que contiene. Este tipo de hierro es más fácilmente absorbible por parte del intestino humano, pero una vez absorbido induce la formación de compuestos cancerígenos. Este tipo de carne implica aquella que cocinada adquiere un color marrón, como la de vacuno, parte de la de cerdo, cordero y caballo.