La adopción de cachorros suele estar muy solicitada y con toda justificación, a quien no le gusta ver crecer a su nuevo compañero y la ternura e inocencia que despiertan en edades tempranas. Hoy en día por desgracia son muchas las empresas que crían animales de forma masiva y en condiciones lamentables con el único fin de lucrarse en lugar de tener en consideración los animales y sus derechos.
Este artículo tiene como objetivo orientarte a su educación y cuidado si eliges adoptar un cachorro, aunque de primeras son los más llamativos piénsalo bien, va a ser tu compañero muchísimo tiempo y es una responsabilidad el cómo te comportes desde que te conoce para que crezca con confianza y lealtad. La atención que le prestes para que el aprenda de ti. Algunos adultos vienen ya aprendidos, sobre todo los que han tenido malos tratos o abandonos y son sumamente cariñosos y atentos si les tratas bien además de ser más sencillos de cuidar que educar a un perro o gato desde temprana edad pues son más autosuficientes y conocen los peligros.
Lo primero es que durante las primeras semanas de vida necesita cuidados contínuos, higiene óptima para prevenir infecciones y una temperatura constante, además come cada dos o tres horas el 10% de su peso aproximadamente, al adoptar un cachorro no dudes en hacer toda clase de preguntas que necesites o te vayan surgiendo con el paso de los días.
1- La bienvenida
Seguramente sea un animal encantador, que todo el mundo se derrita al verle y quiera tocarlo y acariciarlo, pero acaba de llegar a un mundo nuevo, está asustado y no sabe qué ocurre ni quienes son todos esos que quieren tocarle, es importante que el impacto sea menor, no hacer voces y acercarte poco a poco, dejándote oler si así lo quiere, si se retira un poco dejarle un poco de espacio para que vea que respetamos su entorno, poco a poco se dará cuenta de lo que tiene y él mismo irá a por ti y todo el que quiere conocerle.
He tenido experiencias con perros que tienen una gran inseguridad por haber tenido una entrada difícil en la vida y son cosas muy importantes desde el primer día que le tenemos, les reforzará muchísimo su autoestima y seguridad viendo que son respetados y queridos, pues sobre todo si llegan los momentos que quiere atención aprovecha para darle caricias y abrazos pues verá que le encanta.
2- Intenta respetar sus costumbres.
Tenemos que pensar bien donde va a dormir, a comer y beber, desde los primeros días y respetarlos, nada más llegar a casa se va a sentir muy desorientado y tendrá que aprender muchísimas cosas además de sentir curiosidad por muchas más, con lo que las cosas sencillas para su día a día es mejor definirlas y que las encuentre siempre que las necesite además de darle a entender que tiene su espacio, lo que le hará sentirse importante con nosotros y desarrollar mejor su confianza.
De igual forma con sus juguetes y cables o elementos que puedan ponerle en peligro ¡incluidas plantas o sustancias que sean tóxicas como de limpieza!, piensa que es uno más en la familia y tiene derecho a tener un hueco de la casa o sus cosas, ¡es uno más! cuanto más respeto le tengas más te lo tendrá el a ti.
3- Separa sus juguetes de lo que no lo son.
Puede parecer gracioso darle a morder un zapato para jugar, pero piensa que él empieza a distinguir qué cosas son jueguetes y cuales no, si le damos malas costumbres aunque sea en un momento determinado luego no nos tenemos que quejar de que lo haga él sólo… recordemos que ellos van a ser quienes nosotros les demos ejemplo.
4- Cuida su aseo.
En primer lugar está la cuestión de pasarle el cepillo, usar toallitas húmedas o espumas secas para esta función, no es sólo por una razón meramente higiénica, tiene que ser una costumbre que él identificará como un juego y una costumbre que le gusta, digamos que tienes esa confianza para cogerle y pasarle ese cepillo que tanto le gusta suavemente dándole un masaje, reforzará notablemente el lazo entre tú y él y verás cuando a veces te lo pida o no quiera que te muevas para seguir limpiándole, ellos acaban ganándose tu cariño y el aseo era una tarea importante de su madre cuando son cachorros que también deberías proporcionarle.
En caso de darle el primer baño, se realiza después del ciclo de vacunas, con agua tibia, evitando corrientes de aire y con champús específicos para el animal que se trate, el ph de la piel del perro o el gato no es lo mismo que el humano. En casos en donde queramos darle baños al aire libre y usando mangueras, en esta etapa que conoce cosas nuevas, usa la manguera con cuidado y vigila la presión del agua pues podría cogerle miedo cuidando las zonas e los ojos y las orejas.
5- Conoce sus comidas
Los cachorros suelen comer 3 veces al día hasta los seis meses de edad, luego un par de veces unos meses y poco a poco varía en función de la raza y la actividad, algo que cuanto mejor conozcas mejor le entenderás. Se desaconseja darle comida humana al menos a tan temprana edad, la que sueles comprar para cachorros tienen el equilibrio ideal para su crecimiento y siempre intenta que sean raciones fijas según veas que se alimenta, pero si nos pasamos él intentará comer todo lo que pueda por instinto y si no tiene actividad puede engordar notablemente.
En el caso de que tome biberón, tenemos que conseguir que el cachorro lo enganche y pueda alimentarse, lo aconsejable es coger al animal de una forma natural como si lo tomara de su madre, con el biberón boca abajo un poco por encima de su cabeza y con la otra mano cogemos el cachorro entre sus patas delantera mirando hacia arriba. Siempre hay que ajustar la temperatura de la leche a 37º y que sea una leche artificial adecuada.
6- Los dulces y los premios
Es bien sabido que los dulces y los animales no se llevan bien, no tienen un sistema digestivo evolucionado para tanto azúcar, si le quieres dar un premio, dale de los que vienen preparados en comercios relacionados, que seguro que le va a gustar mucho más y lo asociará mejor a algo que ha hecho bien. Los huesos en algunas razas pueden ser peligrosos porque se pueden astillar y hacer perforaciones en el estómago.
7- El agua, elemento básico.
Ten por costumbre ver si tiene agua de sobra, que esté fresca y limpia, como nos pasa a nosotros es lo más importante, y a veces es normal que después de sacarle, si ha hecho un buen ejercicio acudirá a su bebedero.
8- Los Juegos
Si quiere jugar pero no es el momento, no le hagas caso, no le prestes atención, pues puede malinterpretar la situación y así se da cuenta de que ahora no es el momento, pero cuando sea el momento no dudes en llamarlo y animarlo a participar en juegos contigo, eres su compañero/a y le encantará pasar estos momentos contigo, el juego es básico en el aprendizaje de todo animal.
Cuando a veces coge algún objeto que sabe que no puede y quiere que le persigas, directamente no lo hagas, tienes que darle importancia a las cosas positivas pero no animar las cosas negativas o malos comportamientos, por mucho que quieras recuperarlo sólo harás que salga corriendo y consiga que participes en su juego, si no le haces caso, acabará dejándolo en algún lugar dándose cuenta.
9- La mordida
Ellos no controlan la fuerza que tienen, normalmente van aprendiéndolo en comportamientos como cuando comen del pecho de su madre, pero a veces puede ser que seamos su campo de prueba, si ves que hace mucha presión al jugar emite un sonido que no sea demasiado alto pero que se de cuenta que te molesta, para que entienda el límite que puede tener.
10- La paciencia… los pipis y las cacas
Ante todo piensa que está aprendiendo… que hará errores y ni se dará cuenta, pero evita gritarle y mucho menos pegarle, tienes que educarle de una forma en la que él se de cuenta y no se vea inseguro que puede ser mucho peor, si ve que hace un fallo, pero se lo enseñas y le ayudas te lo agradecerá más y la convivencia será mucho mejor. Darle miedo o coaccionarle puede ser determinante en la personalidad cuando tenga una edad adulta y confundir reacciones o hacerlo por pura falta de confianza.
Como es normal cuando nacen no saben aún como controlar sus esfínteres, es aconsejable tenerlo en cuenta si tenemos alfombras o elementos que podamos quitar hasta que aprende, para limpiarlo en ese caso, cubre la zona con un gran papel de periódico y echa unas gotas de lejía, él asociará a que ha hecho sus necesidades y pusiste un periódico, luego… el periódico es la zona de las necesidades, poco a poco cogerá la costumbre natural de hacerlo encima de periódicos que dejes en alguna zona determinada que él conozca
En el caso de que lo haga en la calle, ¡premiále y que te vea contenta! le dará más motivaciones a repetirlo y que estés orgullosa de él.
11- El paseo
Al principio siempre llévalo con correa, sobre todo en las zonas donde hay tráfico, siempre tenemos que tenerlo en casa con el collar para estar acostumbrado. Tenemos que practicar su atención a diario para que cuando le llamemos se ponga a nuestro lado, incluso estando en casa, así al salir a la calle si se va a poner en peligro podemos remediarlo con una simple llamada.
Espero que te haya gustado y te animes a tener un nuevo compañero en tu vida, todo esto parece mucho pero créeme que son sencillas costumbres para tener un nuevo amigo en nuestra vida que nos entenderá en nuestro día a día para devolvernos todo lo que le damos, pues los animales en el fondo son formidables si se les da ocasión.